miércoles, 31 de octubre de 2018

Arte genético

Neil Harbisson. 'Cabeza sonocromática” Muestra: + Humanos. El futuro de nuestra especie, Barcelona, 7 octubre 2015 - 10 abril 2016

Neil Harbisson escucha los colores

Neil Harbisson: Primer ciudadano cyborg

Neil Harbisson: documento de identidad

Arte genético

Marion Laval Que le cheval vive en moi
Centre d’art contemporain Rurart, à Vouillé, 2011. Transfusión

Marion Laval Que le cheval vive en moi (2011)
prótesis de caballo

Marion Laval Que le cheval vive en moi (2011)

Arte genético

TCE&A Oron Catts, lonat Zurr: Disembodied Cuisine, Instalación (2003), Francia, Exposición L'art Biotech

Stelarc. Ear on armExtra-ear  (2003)  

Stelarc. Ear on armExtra-ear  (2003)  

Stelarc. Ear on armExtra-ear  (2003) 

Arte genético

Tissue Culture and Art Project: Oron Catts, Ionnat Zurr
 Semi-living Dolls, 2001

TCE&A Oron Catts, lonat Zurr Semi-living Dolls, 2001
Verdad Absoluta, Biotecnología, Capitalismo, Demagogia, Eugenesia, Miedo, Esperanza, Doll G

TCE&A Oron Catts, lonat Zurr: Disembodied Cuisine, Cocina
sin cuerpo (2003), Francia, Exposición L'art Biotech

TCE&A Oron Catts, lonat Zurr Cuero sin víctimas (2008), MOMA, New York    

Arte genético

Daniel Rivera, México, 2004. Maqueta del diseño tecnológico para el Zócalo, México

Daniel Rivera, México, 2004. Maqueta del diseño tecnológico para el Zócalo, México

Catts y Zurr Semi-living worry dolls (quitapenas), 2008


Arte genético

Eduardo Kac, Manifiesto por el arte genético (1998)

Eduardo Kac, Alba. GFPBunny (2000), Avignon

Eduardo Kac “Edunia” (2009) Weisman Art Museum, en Minneapolis

Bioarte o arte transgénico

Bioarte o arte transgénico: obras con “piezas vivientes” independizadas de cuerpos u organismos de origen. ¿herramienta para la reflexión colectiva y política de resistencia? o ¿experimentación desregulada de la ética y el derecho?


Arte transgénico
Edward Steichen Delphinium (1936), Instalación, MOMA, New York


Arte transgénico
Edward Steichen Delphinium (1936) MOMA, New York

Biopolítica y producción de valor: formas de control social y gobierno de la vida a través de la biotecnología

Charla de la Dra. Gabriela D’Odorico
junio de 2018

El bioarte y la comunicación pública de la ciencia
Bioarte o arte transgénico: obras con “piezas vivientes” independizadas de cuerpos u organismos de origen.


¿herramienta para la reflexión colectiva y política de resistencia?
o
¿experimentación desregulada de la ética y el derecho? 


CLASE IX "Tecnologías disciplinarias y construcción de la subjetividad"



Reportaje a la antropóloga Paula Sibilia acerca de las novedades culturales de nuestro siglo XXI

CLASE IX "Tecnologías disciplinarias y construcción de la subjetividad"

Archivo General de la Nación. Célula censal del  10 de mayo de 1895. Documento Fotográfico 


Diario Páginas 12, Caricatura de Langer en relación al Censo Nacional 2010, Buenos Aires, 2010. 

CLASE IX "Tecnologías disciplinarias y construcción de la subjetividad"

Juan Manuel Blandes Un episodio de la fiebre amarilla en Buenos Aires (1871) Óleo sobre tela, 230 x 180 cm. Museo Nacional de Artes Visuales 

CLASE IX "Tecnologías disciplinarias y construcción de la subjetividad"

Archivo General de la Nación. Dormitorio de mujeres en uno de los pabellones del Hotel de inmigrantes de Buenos Aires, c. 1912. Documento fotográfico.  
Archivo General de la Nación. Enseñanza de labores domésticas en las dependencias del Hotel de inmigrantes de Buenos Aires, 1914. Documento fotográfico. 




Archivo General de la Nación. Buenos Aires, conventillo, c1890. Documento fotográfico  

CLASE IX "Tecnologías disciplinarias y construcción de la subjetividad"

Archivo General de la Nación. Instituto Félix Bernasconi, Buenos Aires, c.1923
Documentos fotográficos 


Archivo General de la Nación. Escuela Normal Mixta, Laboratorio de Química, Concepción del Uruguay, Entre Ríos, 1943.
Documentos Fotográficos. Inventario 23479.

CLASE IX "Tecnologías disciplinarias y construcción de la subjetividad"

Archivo General de la Nación. Correccional de Menores, 1914
Documento fotográfico


Archivo General de la Nación. Cárcel del fin del mundo, comedor de reclusos. Ushuaia 1933.
Documento Fotográfico 18363



Archivo General de la Nación. Patronato de la Infancia, Buenos Aires, 1925.
Documento Fotográfico.

CLASE VIII "El procesamiento de la otredad"

Caricaturas contemporáneas argentinas 

QUINO 



 
CALOI


LANGER 

CLASE VIII "El procesamiento de la otredad"

El eclipse
Augusto Monterroso

Cuando fray Bartolomé Arrazola se sintió perdido aceptó que ya nada podría salvarlo. La selva poderosa de Guatemala lo había apresado, implacable y definitiva. Ante su ignorancia topográfica se sentó con tranquilidad a esperar la muerte. Quiso morir allí, sin ninguna esperanza, aislado, con el pensamiento fijo en la España distante, particularmente en el convento de los Abrojos, donde Carlos Quinto condescendiera una vez a bajar de su eminencia para decirle que confiaba en el celo religioso de su labor redentora.

Al despertar se encontró rodeado por un grupo de indígenas de rostro impasible que se disponían a sacrificarlo ante un altar, un altar que a Bartolomé le pareció como el lecho en que descansaría, al fin, de sus temores, de su destino, de sí mismo.

Tres años en el país le habían conferido un mediano dominio de las lenguas nativas. Intentó algo. Dijo algunas palabras que fueron comprendidas.

Entonces floreció en él una idea que tuvo por digna de su talento y de su cultura universal y de su arduo conocimiento de Aristóteles. Recordó que para ese día se esperaba un eclipse total de sol. Y dispuso, en lo más íntimo, valerse de aquel conocimiento para engañar a sus opresores y salvar la vida.

-Si me matáis -les dijo- puedo hacer que el sol se oscurezca en su altura.

Los indígenas lo miraron fijamente y Bartolomé sorprendió la incredulidad en sus ojos. Vio que se produjo un pequeño consejo, y esperó confiado, no sin cierto desdén.

Dos horas después el corazón de fray Bartolomé Arrazola chorreaba su sangre vehemente sobre la piedra de los sacrificios (brillante bajo la opaca luz de un sol eclipsado), mientras uno de los indígenas recitaba sin ninguna inflexión de voz, sin prisa, una por una, las infinitas fechas en que se producirían eclipses solares y lunares, que los astrónomos de la comunidad maya habían previsto y anotado en sus códices sin la valiosa ayuda de Aristóteles.